
2,292 Plantas presenciando un concierto en vivo en Barcelona*
Alejandra Romano
1. Saludo de beso: Empezaremos por olvidar nuestra muy mexicana costumbre de saludarnos de beso y apapacho. Quizá lo recuperaremos con nuestros más cercanos amigos y familiares, pero eso de que andemos repartiendo besos a cualquiera que conocemos, quedará en el olvido; cosa que algunos (o, mejor dicho, muchas de nosotras) vamos a agradecer.
2. Home Office Forever: Las empresas se están dando cuenta de los beneficios que tiene el que la gente trabaje en su casa; han reducido los tamaños de las oficinas y con ello los montos de renta y gastos fijos, pues ahora, el empleado, es el que carga con los costos de luz, renta, equipo y hasta el café y las galletitas corren por su cuenta.
3. Gel, tapabocas y mascarillas: pasará mucho tiempo antes que la gente se anime a salir sin protección. El tapabocas llegó para quedarse, claro que hay necios que no lo usan (ni en los peores días de la pandemia), pero todos los que lo portan, miran con desprecio y desaprobación a los que andan con la cara encuerada. No se diga del gel, que cargaremos en la bolsa, el auto y lo encontraremos en prácticamente todos los establecimientos por mucho, mucho tiempo.
4. Educación en línea: por largo tiempo la mayoría de las escuelas mantendrán los sistemas virtuales de educación gracias a que los alumnos ya se acostumbraron a estudiar a través de una pantalla. Seremos testigos de la proliferación de cursos en línea y cientos de Escuelas e Institutos Patito que se aprovecharán de esta tendencia para vender cualquier clase de curso, diplomado y clase virtual y, con ello, habrá una invasión de “expertos” de todo tipo, con títulos de pacotilla obtenidos en línea.
5. Fiestas y bailongos: ¿cuánto tiempo tendrá que pasar antes de volvernos a animar a ir a una fiesta, de esas en algún bar o antro, todos aglomerados, bailando con el que esté enfrente y compartiendo nuestros fluidos corporales sin el menor recato? Tendremos que irnos acostumbrando a las fiestas de pocas personas, todos a distancias de medio metro (por lo menos) y no volver a bailar una “calmadita”, hasta nuevo aviso.
6. Muerte del Tinder: esta app que se convirtió en la reina de las aplicaciones para ligar, quedará en el olvido. ¿Quién se va a atrever a salir en un “date” con un total desconocido? Posiblemente ya estén desarrollando una aplicación similar (o hasta el mismo Tinder ya está haciendo las correcciones necesarias), pero en lugar de subir tu foto, deberás mostrar un documento que compruebe que no eres portador del C-19.
7. Adiós a las pequeñas librerías y librerías de viejo: los que gozábamos de ir a estos sagrados recintos, vamos a sufrir amargamente gracias a que esta pandemia acabó por reventar estos lindos negocios. Nos veremos obligados a comprar en mega-supermercados de libros tipo Gandhi (que alguna vez fue una librería de verdad y un espacio delicioso), o peor aún, caer en las garras de Amazon como única alternativa.
8. Todo a domicilio: en México ya teníamos gran cantidad de servicios a domicilio, sobre todo en las grandes ciudades, pero los negocios que no lo tenían, seguro que ya lo han implementado, y esto también se quedará. Ya que hemos gozado la ventaja de que nos traigan todo a casa, vamos a seguir solicitando este servicio, con pandemia o sin ella.
9. Vacaciones imposibles: si para muchos ya era difícil, antes de la pandemia, ahorrar lo suficiente para una buena vacación, ahora será peor. Los precios de los boletos de avión se irán a los cielos y los hoteles tratarán a toda costa de recuperar las pérdidas provocadas por esta crisis, como ejemplo, basta ver la seria crisis por la que está atravesando la empresa AirBnb. Así que habrá que ir haciéndonos a la idea de que nuestras próximas vacaciones se reducirán a ir a remar a Chapultepec o ir a la Feria (si es que algún día los abren).
10. Vigilados para siempre: el actual desarrollo de aplicaciones que analizan dónde has estado y con quienes has tenido contacto es ya un hecho y, en un futuro, es posible que sea obligatorio. Para entrar en ciertos establecimientos nos pedirán que activemos una app de vigilancia y certifiquemos que no hemos estado en zonas donde hay niveles alto de contagio; aquellos que no cuenten con ella, se les negará rotundamente la entrada o acceso a cierto tipo de servicios.
* Fotografía tomada de : https://mimicnews.com/photos-of-2292-plants-attending-a-live-concert-in-barcelona
Sobre la autora
Alejandra Romano (Ciudad de México, 1992) Estudió diseño gráfico en la UAM y la licenciatura en letras. Ha trabajado en el área de diseño gráfico y editorial electrónico en empresas pioneras del diseño digital. Actualmente cursa una especialización en cine y edición de video y es la asistente en diseño y programación de El Rizo Robado.